Capitulo 4: Cosas Extrañas

Ya eran las siete y sonó el maldito despertador... Martes… Faltaba todavía mucho para que acabara la semana. No sé por qué me daba que iba a ser una semana larga y que iba a haber problemas. Las ocho ya y no me venían a buscar… Espero que no me dejen plantada otra vez, si no…

Sonó la puerta y di un bote del susto.

En el camino de mi casa al instituto no dejaban de hablar de Zayn, Liam, Niall y Harry.

Yo ya me estaba cabreando, pero llegamos a la puerta del instituto y en cuanto ví a Mauro se me pasó todo.

Tocaba música, y el profesor estaba  con un cabreo que no pude hablar con las chicas de nada, tendría que esperar al recreo.

Ya tocó el timbre para salir en el recreo y las propuse quedar esta tarde cada una con el suyo e ir al parque y demás.

Todas dijeron que sí, solo me quedaba decírselo a Mauro.

En el recreo se vino un compañero de clase llamado Emmanuel ya que empezamos a gritar.

Emmanuel: ¿Por qué gritáis tanto?

Yo: ¿Conoces a los de One Direction?

Emmanuel: Algo e oído de ellos… No me gusta el grupo.

Coral ¿Cómo que no? Si son increíbles… Deberías conocerlos.

Emmanuel: Va a ser que no me voy a ir a Inglaterra.

Yo: No están allí… Están aquí

Emmanuel: Vale, vale... No me comáis.

Yo: Ahora vengo, voy a hablar con Mauro. Hasta luego chicas, adios Emma.

Me fui corriendo en busca de Mauro, cuando de repente me choco con Louis que estaba buscando a Sergio para darle un sorpresa.

Yo:  ¿Ay! Perdón. ¿Louis?

Louis: Sí… ¿Tanto te extaña?

Yo: Pues un poco… ¿Qué haces aquí?

Louis: Buscando a Sergio que le tengo que dar este paquete… Bueno mejor daselo tu porfa, así es una sorpresa.

Yo: Vale, bueno adiós.

Louis: Adiós.

Bueno, al parecer vería a Mauro entre clase y clase.

No me costó trabajo encontrar a Sergio. Le di el paquete y lo abrió delante de todos con una sonrisa enorme en la cara.

Yo: Sergio, ¿qué es?

Sergio: Es una invitación para ir esta noche a un restaurante.

Yo: ¡Qué bien!

Sergio: Ya ves... Estoy super feliz.

Yo: Aprovéchalo.

Vi a Mauro que se acercaba donde estábamos nosotros, le di un beso y le pregunté lo de esta tarde. Me respondió que no sabía todavía, luego me lo confirmaría.

Llegó la hora de irse a casa y fue como siempre, pero a la mitad del camino vimos a los chicos cantando una canción mientras decía el nombre de cada una de las chicas y de Sergio.

Los vi tan felices que los dejamos ahí.

Ya quedaba menos de una hora para quedar y Mauro me confirmó que sí que podía ir, yo me quedé más feliz hasta que llegó la hora, y nadie salvo Mauro se presento. Mauro y yo nos fuimos a un parque cerca y vimos a Sergio y Louis agarrados de la mano. Mauro y yo nos miramos y empezamos a reír pero seguía cabreada y él me repetía que no me enfadara con ellas, pero era difícil porque ni siquiera avisaron.

Me fui a casa enfadada pero al menos me llamó Ari para decirme el por qué.

*Conversación telefónica*

Ari: Guapa

Yo: No mientas -la respondí secamente-.

Ari: Lo siento por lo de esta tarde, pero ya había comprado entradas para el cine.

Yo: ¿Y no pudistes avisar?

Ari: Lo siento un montón -en el fondo del teléfono se escuchó un grito diciendo que colgara- Lo siento, tengo que colgar, seguimos hablando mañana ¿vale? Un beso.

Yo: Chao.

*Fin conversación telefónica*

Bueno -pensé- mañana hablaré seriamente con las demás, ahora me voy a la cama.

Se escuchó un ruido extraño en mi casa, como que estaban forzando la cerradura y…

FIN MAÑANA SIGO