Capítulo 6: Para un día especial

Cris: Vale. Lo que me pasa es…-se quedo unos minutos pensando en las palabras adecuadas hasta que al fin lo dijo- Estoy un poco celosa

Yo: ¿De quién y por qué?

Cris: De todas… Antes los veía más y ahora no los veo ni a la hora de comer y echo de menos las risas que me echaba con ellos y…

Yo: Tengo una idea -la corté rápidamente- voy a montar una mini fiesta en el parque y así les hago dar cuenta de lo que te pasa.

Cris: No sé si será buena idea.

Yo: Hazme caso que si lo será. Aun así me lo deben.

Estuvimos toda la tarde dando una vuelta por Madrid y de compras… Ella se compro un vestido precioso(el de la foto) y yo solo un par de zapatillas.

Ya eran las ocho y media y me tenía que ir.

Yo: Ya me tengo que ir. Hablamos mañana por teléfono para empezar con los preparativos.

Cris: Vale. Bueno adiós.

Yo: Adiós.

Mientras estaba en el tren para volver, llame a Niall para contarle todo.

*Conversación telefónica*

Yo: Hola Niall, ¿molesto?

Niall: No, que va.

Yo: Vale es para decirte que podríais hacer un poco mas de caso a Cris, ya que la habéis dejado sola y por eso vamos a hacer una pequeña fiesta.

Niall: ¿A Cris? Si ella decía que no quería salir… Bueno, ¿la fiesta cuando será?

Yo: Todavía no lo sé, mañana te lo confirmo.

Niall: Vale. Bueno me tengo que ir.

Yo: Adiós.

*fin conversación telefónica*

Llegue a mi casa y vi a mi madre hablando con mi padre, mi padre se levanto y cuando me iba a dar un abrazo yo me aparte.

Mi padre: Es normal que hagas eso…

Yo me puse a llorar y me fui corriendo a mi habitación. Se oía desde el salón a mi madre diciéndole:

Mi madre: Espera voy a hablar con ella… No tardo.

Mi madre se acerco a mi cama y me dijo:

Mi madre: ¿Qué te pasa hija?

Yo: No se no puedo verle y… Espero que no confíes en el… Se que todo el mundo necesita otra oportunidad, pero lo que hizo él no la tiene.

Mi madre: Ya sé que nos hizo daño pero si ha venido será por algo.

Yo: Yo que tu no me fiaría mucho y me voy a acostar que tengo sueño.

Mi madre: Buenas noches.

Y apagó la luz y me cerró la puerta.

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Al día siguiente intente hacer el menor ruido posible y así no despertar a mi padre.

Salí de casa en silencio y en el camino con Andrea me contaba todo lo que estuvo haciendo, yo la conté lo que me pasaba y con lagrimas en la cara. Me abrazó y me dijo que todo se solucionaría, todo lo que me rodeaba acabaría solucionándose.

Para alegrarme un poco la pregunté que si se vendría a la fiesta y me dijo que ella encantada.

Una vez en la puerta del instituto hice lo que todo los días, buscar a Mauro y contárselo.

Las clases pasaron lentas… Pero no fueron aburridas… Hacía lo de siempre… En mate hacia deberes de otras asignaturas, en tecno dormía un rato y en ingles me reía un rato para que se me olvidara todo.

En el recreo me dispuse a buscar a Ainhoa y contarla también todo y lo de One Direction. Pero cuando la encontré sonó otra vez el timbre.

Esta vez me tocaba clase de lengua y estuve toda la hora hablando con mi amiga Noe, porque ella antes pasó por una situación parecida a la mía y es la que más me entendería ahora.

Entre clase y clase estaban los cinco minutos que me iba corriendo a hablar con Ari, Bea, María y Coral y de lo que hacían.

Ya en la salida es cuando hablaba con Sergio y siempre me iba con una sonrisa de oreja a oreja. Me agradecía todo lo que hacía y yo no hacía nada pero bueno…

Yo: Bueno me voy chicos, que hoy tengo prisa.

Todos: Vale.

Lo dijeron tan a la vez que me asusté y todo.

Cuando llegue a mi casa no había nadie, solo una nota de mi madre que decía…

FIN, LO SEGUIRÉ Y PEDIR SIGUIENTE.